50 años educando en Barranqueras

La comunidad educativa del Colegio Don Orione
de Barranqueras –Chaco– celebra su aniversario.


Ya había abierto su ciclo lectivo 2207 con una misa
multitudinaria el día 12 de marzo, con la que iniciaba
los festejos de su cincuentenario. Festejos que se
extenderán durante todo el año para celebrar este
acontecimiento tan trascendental para los orionitas
y para toda la comunidad.

El 23 de Junio, fecha del nacimiento de San Luis
Orione se programó el acto académico escolar central,
al que fueron autoridades provinciales, municipales,
superiores de la congregación, fuerzas de seguridad,
directivos y personal de todas las escuelas privada
y públicas de Barranqueras y también de la ciudad de
Resistencia, ex docentes, en especial primeros maestros,
ex alumnos, ex colaboradores, alumnos y docentes de la
casa, padres y vecinos.

La presencia fue masiva, a pesar de la inclemencia
del tiempo; ni el frío reinante quitaba la calidez
del reencuentro. La sorpresa de los que volvían después
de mucho tiempo, se notaba en el asombro de sus miradas
al ver el viejo colegio tan cambiado, quedando sorprendidos
de su crecimiento edilicio.

Como todo acto el protocolo fue respetado, presidieron
el mismo las banderas de ceremonias y papal. La sra. directora
de EGB I y II dio la bienvenida a los presentes y el
P. Cristian Ducloux, representante legal, dio la bendición
a todos agradeció el trabajo realizado en estos 50 años,
para ser lo que hoy es uno de los principales establecimientos
educativos de la localidad.

Las autoridades presentes, en representación del gobierno
provincial, de la Legislatura, de la municipalidad,
en forma independiente hicieron entrega de placas recordatorias,
que fueron descubiertas en ese momento.

El Sr. Ministro de Gobierno, e diputados provincial (ex alumno
orionita) y la intendente de Barranqueras en sus breves alocuciones
elogiaron el trabajo realizado por toda la comunidad para
lograr esta obra. También un grupo de ex docentes, entre ellas,
primeras maestras, quisieron dejar su sentido homenaje en una
placa recordatoria entregada a las autoridades directivas.
En ella estaba implícito el cariño y los recuerdos imborrables de
todo lo vivido en las aulas, la memoria del Padre Roque Tonoli -y de
todos los que ya no están- fliares de ellos se encontraban entre el
público presente como invitados especiales y se sintieron especialmente
conmovidos.

Las adhesiones y los buenos augurios llegaron por doquier, en
especial de sacerdotes que pasaron por el colegio y de todas las
casas orionitas de Argentina y México.

Alumnos de Polimodal recitaron una poesía escrita por una ex docente
recientemente fallecida.

El coro de niños emocionó a todos al cantar “El himno a Don Orione”,
el mismo que fuera enseñado a los primeros maestros en el inicio del
colegio, por su fundador, el p. Roque.

Con la ayuda de la tecnología los principales recuerdos de estos
cincuenta años se hicieron presente a través de fotos y acompañados
de una reseña oral en un power point muy emocionante.

El Padre Jacinto Rojas, representando a la Congregación, felicitó a
todos en este aniversario y exhortó a seguir trabajando firmes y con
alegría; pidió al señor bendiciones para que la obra continúe.

Y como todo cumpleaños no podía faltar la torta, gigantesca, con velas
destellantes acompañando el tradicional feliz cumpleaños, entonados
por todos, y entre aplausos, risas y làgrimas furtivas, de pie se
formó un gran círculo donde se configuraron las generaciones de docentes
actuales, ex maestros, alumnos, amigos, ect y el nuevo himno al
Santo de Nuestro Tiempo, se escuchó en las voces juveniles.

Un brindis sencillo compartido con todos dejó traslucir esa común
unión entre los miembros de la comunidad educativa, religiosa,
padres, vecinos y colaboradores. Fue el broche de oro para esta
conmemoración imborrable.
Sin duda estos momentos vividos se repetirán en el transcurso del año
y en cada ocasión los mismos sentimientos aflorarán porque están
arraigados en el corazón de todos los orionitas.

Don Orione interceda para que podamos asumir con responsabilidad
la misión de actualizar el carisma hoy. Es ese el desafío…

Ave María y adelante!!!